La confianza en uno mismo es el primer paso para alcanzar grandes cosas en la vida. Como dice el refrán: si no confías tú en ti mismo, nadie lo hará. Debemos valorar nuestras cualidades y saber en qué aspectos somos mejores para potenciarlo. Evidentemente no seremos igual de buenos en todas las facetas de la vida pero siempre hay algo que sobresale en la personalidad y cualidades de un ser humano. En el momento en que no tenemos autoestima, es cuando no conseguimos lograr nuestros objetivos. Por ello, la autoestima es un requisito fundamental para tener éxito. En este sentido, son muchas las personas que buscan rituales que les impulsen a confiar más en sí mismos y a aceptarse tal y como son.
Después de un tiempo de meditación, deberemos fijarnos en nuestras cualidades y defectos, tanto a nivel físico como intelectual, personal y emocional. Después, cogeremos a alguien cercano como ejemplo y haremos comparativas para darnos cuenta de que seguramente esa persona no posea las mismas virtudes que nosotros.
Otro paso que debemos realizar es identificar los aspectos que no nos gustan de nosotros y que podemos cambiar. Entonces nos visualizamos tal y como nos gustaría ser dentro de unos límites reales y que estén a nuestro alcance. Nos percataremos de que más de una cuestión puede ser invertida y mejorada simplemente cambiando nuestros pensamientos y formas de vernos a nosotros mismos y de ver el mundo.
Si hacemos bien el ritual, se creará una ilusión de dos personas frente al espejo. Nuestro Yo actual y nuestro Yo del futuro. Podremos ver cómo seremos si conseguimos mejorar la autoestima hacía nosotros mismos. Al finalizar, deberemos salir de ese estado de trance. Apagaremos las velas echando la cera caliente sobre un recipiente. Colocaremos ese recipiente junto a las velas en la mesita de nuestra habitación, recurriendo a ellas cada vez que volvamos a tener episodios de negatividad y baja autoestima.
Una opción es hacernos con un colgante que permita introducir dentro de su objeto principal algún detalle. En su interior, colocaremos unas gotas de cera de las velas y de esta forma irá con nosotros a todas partes la fuerza del ritual.
Para que este ritual tenga un mayor grado de efecto, se deberá recurrir cada cierto tiempo a una serie de frases que nos recordarán que nadie es superior ni mejor que nosotros, sino distintos. Que cada persona tiene unas cualidades y virtudes diferentes pero que no por ello son menos que el resto. Recordarnos en qué destacamos y cómo podemos potenciarlo.
Ritual para potenciar el valor de la autoestima
El ritual que vamos a explicar a continuación se debe realizar en Luna Nueva para conseguir un mayor alcance de los poderes mágicos. Para ello, deberemos disponer de dos velas blancas, una vela roja y un espejo. Colocaremos las velas en forma de triángulo frente a nosotros y frente al espejo. Después relajaremos nuestra mente y nos concentraremos en la imagen que se refleja en el cuerpo, dejándonos llevar por los sentimientos que comienzan a florecer.Después de un tiempo de meditación, deberemos fijarnos en nuestras cualidades y defectos, tanto a nivel físico como intelectual, personal y emocional. Después, cogeremos a alguien cercano como ejemplo y haremos comparativas para darnos cuenta de que seguramente esa persona no posea las mismas virtudes que nosotros.
Otro paso que debemos realizar es identificar los aspectos que no nos gustan de nosotros y que podemos cambiar. Entonces nos visualizamos tal y como nos gustaría ser dentro de unos límites reales y que estén a nuestro alcance. Nos percataremos de que más de una cuestión puede ser invertida y mejorada simplemente cambiando nuestros pensamientos y formas de vernos a nosotros mismos y de ver el mundo.
Si hacemos bien el ritual, se creará una ilusión de dos personas frente al espejo. Nuestro Yo actual y nuestro Yo del futuro. Podremos ver cómo seremos si conseguimos mejorar la autoestima hacía nosotros mismos. Al finalizar, deberemos salir de ese estado de trance. Apagaremos las velas echando la cera caliente sobre un recipiente. Colocaremos ese recipiente junto a las velas en la mesita de nuestra habitación, recurriendo a ellas cada vez que volvamos a tener episodios de negatividad y baja autoestima.
Una opción es hacernos con un colgante que permita introducir dentro de su objeto principal algún detalle. En su interior, colocaremos unas gotas de cera de las velas y de esta forma irá con nosotros a todas partes la fuerza del ritual.
Para que este ritual tenga un mayor grado de efecto, se deberá recurrir cada cierto tiempo a una serie de frases que nos recordarán que nadie es superior ni mejor que nosotros, sino distintos. Que cada persona tiene unas cualidades y virtudes diferentes pero que no por ello son menos que el resto. Recordarnos en qué destacamos y cómo podemos potenciarlo.